El Gran Museo del Mundo Maya, es un proyecto que será recordado por muchos años por la firma Adagio. El objetivo de este centro, según Lightecture, es reunir 750.000 objetos en 2.600 metros cuadrados de salas permanentes y temporales, y además mostrar a la civilización maya no como una reliquia arqueológica sino como una cultura 100% viva. ¡Todo un reto!

Especialmente, en el área de mapeo de video se llevó a cabo en colaboración con Lightemotion la iluminación arquitectónica del edificio. Para materializar la esencia de la cultura Maya, Adagio optó por articular la forma del edificio alrededor de un símbolo clave en su visión cosmogónica: el árbol sagrado de la Ceiba, cuyas raíces penetran y conforman el inframundo. Para saber más de este proyecto, da click aquí.

Con este concepto de la creación del mundo a partir del árbol de la Ceiba, se plantea el diseño arquitectónico por parte de Adagio. Siendo más específicos en cuanto a los detalles, un laberinto de barras de metal entrelazadas evocan el tronco y el follaje de los árboles. Para dicha misión, los diseñadores de XYZ y Lightemotion idearon un sistema de iluminación programable, compuesto por 70 proyectores, capaces de reproducir el movimiento de las hojas de los árboles por la noche o bien, durante la oscuridad.

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