La inspiración surge de lo que conocemos y del contexto que permea un proyecto, requiere de una labor de investigación e introspección para hallar la chispa que influya en una obra. Es así, como nace la idea de hacer una representación de las embarcaciones mayas, que en tiempo ancestrales partían de Playa del Carmen en una peregrinación hacia su centro ceremonial en la isla de Cozumel; para realizar estos viajes, los mayas necesitaban embarcaciones y un lugar destinado a su construcción y reparación.
Retomando este concepto, el edificio del complejo de servicios Playa del Carmen evoca a un barco en un astillero, donde puede observarse el esqueleto que envuelve el corazón del proyecto, los espacios habitables que conformarán el Complejo Playa del Carmen.