Elegimos la figura del “Tren del Pensamiento” como concepto para la propuesta de la nueva sede del CINVESTAV, debido a lo que puede representar en relación con el conocimiento y el aprendizaje. Siendo un espacio dedicado a la ciencia y la investigación, este transporte representa el pensamiento que se mantiene en movimiento constante, siempre dinámico. De igual forma, los académicos, estudiantes y personal, como la esencia del combustible que lo empuja, ya que concentran esta energía hacia la búsqueda de soluciones para la sociedad desde el método científico.

En cuanto al proyecto arquitectónico, el «Tren del Pensamiento» tomó como base el trazo existente del sendero circular dentro del terreno, y se propuso que este trazo fuera el contenedor principal del proyecto, y sobre él, atravesando la circunferencia ubicamos las “rieles del ferrocarril”, es decir, el eje de composición sobre el cual “correría” este tren.

En el proyecto, el edificio presenta mayor longitud sobre un eje norte-sur, que brinda la mejor orientación para los espacios de investigación y de las oficinas, y una menor ganancia térmica, ya que el sol se encuentra inclinado todo el año hacia el sur y en verano ligeramente hacia el norte. La orientación también consigue una mayor captación de los vientos dominantes, noreste durante la mañana y sureste (conocido como “viento de tierra”) durante la tarde.

Los servicios de apoyo, conformados por las áreas de jardinería, oficinas de control y mantenimiento, almacenes de residuos (peligrosos y no peligrosos), de materiales, talleres y oficinas sindicales, se ubican con el mismo criterio que se realiza en las estaciones de ferrocarril: como núcleos y/o espacios adyacentes y contiguos a las líneas y a las estaciones. En esta propuesta, se planteó como un edificio cuadrado, que permitiría tomar las cuatro orientaciones para zonificar el área interior de acuerdo a los requerimientos de horario, humedad, asoleamiento, de cada uno de los espacios específicos. 

Se complementa el proyecto con áreas deportivas, orientadas norte-sur para que el uso de las canchas se realice sin problemas de asoleamiento; un área de composta, localizado en el extremo noroeste del terreno, en sentido contrario a los vientos dominantes, para evitar que los olores que pudieran generarse en esta área se transmitan hacia el interior del conjunto; y un punto verde de recolección y reciclaje, ubicado en una zona equidistante de los edificios en el complejo, permitiendo un fácil acceso desde cualquier zona.

Diseñar un espacio moderno e innovador requiere considerar cómo el proyecto impactará en su contexto, por ello, la idea para el edificio del Campus Cinvestav se concibe con el uso de materiales que minimizan el consumo energético para su fabricación y de largo ciclo de vida como el acero y el aluminio (en especial si son reciclados) y la madera o el vidrio, que puedan ser completamente recuperables y/o reutilizables. No se consideran materiales como el PVC o derivados plásticos.

El concepto del tren también nos permite abstraer la idea de los vagones, que se alinean en sucesión y que en nuestro proyecto se convierte se interconectan en un edificio completo. Esta configuración, que se plantea de 4 niveles, con una estructura principal de concreto y una secundaria de conexión en acero, permite que pueda darse un crecimiento modular posterior sin que esto comprometa o distorsione de forma radical la idea de diseño, a medida que el edificio crece.