Se puede tener una experiencia exitosa de interacción con el medio natural que nos rodea, si elegimos las herramientas adecuadas para generar el menor impacto negativo posible y contemplamos la importancia de la zona que nos recibe como huéspedes. 

El proyecto de villas eco-turísticas Sabancuy se adapta a su entorno, incluyendo en su diseño materiales sustentables y respeta las condiciones naturales de su ubicación.

El complejo ecoturístico de bajo impacto, pretende su ubicación en las playas del sur del Estado de Campeche, proponiendo un diseño vanguardista y exclusivo con la menor huella ecológica, se enfoca en sociedades ambientalistas que prevén el uso sustentable de los hábitats como los manglares. Y para lograr este fin, el proyecto mantiene rubros muy específicos que procuran mantener las condiciones naturales, un espacio funcional, sostenible e inteligente.

Teniendo en cuenta que, a lo largo de las costas de la península de Yucatán es común el anidamiento de la tortuga marina, uno de los principales factores que se consideraron es la permeabilidad, un flujo através del terreno que les permita hacer su nido y posteriormente las crías puedan regresar al mar; para lograr este propósito el área de contacto con la superficie es mínima, este contacto se traduce en cinco columnas que desplantan la villa a metro y medio del suelo y cuatro columnas que conforman el garage. Esta elevación adquiere doble propósito permitiendo el libre flujo de la fauna.

Entre las metas de este proyecto está lograr su autosostenibilidad y la promoción del menor impacto posible en el área a través de su construcción, por lo que este diseño procura la delimitación de la villa con bardas verdes, conserva el manglar con la restauración de duna costera y re-vegetación, entre otros detalles, como la iluminación exterior que procura una intensidad baja para evitar afectación a la vegetación de la zona.

La propuesta de cada unidad está conformada por dos volúmenes, el primero, es una caja que aprovecha la longitud disponible del terreno, esta orientación prevé el asoleamiento de la tarde y se protege al cerrar la cara más larga del bloque; este espacio se beneficia con una privilegiada vista al mar, aquí encontraremos el área de social y servicios.

 El segundo volumen, es una caja que descansa sobre el primero, que se acomoda en dirección perpendicular, aprovechando el ancho del terreno y generando vistas espectaculares desde las habitaciones hacia el mar.

Dentro del volumen de la planta baja se ubica el recibidor, una sala, el comedor, la cocina y el baño de visitas, así como las áreas de servicio que incluye el cuarto de servicio con baño y un cuarto de lavado; a un costado de este volumen se desplanta una generosa terraza techada, con piscina y espléndida vista al mar y una techumbre independiente cubre el estacionamiento con espacio para dos vehículos.

En la planta alta encontramos tres recámaras y una terraza descubierta sobre el volúmen de la planta baja, cada cuarto cuenta con baño, vestidor y balcón con vista al mar.

La propuesta ecoturística se proyecta en la región litoral al sur del estado de Campeche, de la superficie total del terreno se han designado 800 metros de área de conservación del mangle, 5 metros como corredor de vegetación y, 5 metros para la la restauración de la duna costera; siendo que el terreno donde podrá ubicarse la villa es de 26 metros de longitud por 20 metros de ancho.

Esta encomienda para lograr el menor impacto ambiental en el complejo ecoturístico requirió una serie de investigaciones sobre proyectos sustentables en el mundo, dónde se reafirmaron tendencias y estrategias que fueron aplicadas en este proyecto: